Add parallel Print Page Options

50 Jesús, entonces, lanzando otra vez un fuerte gritó, expiró.

51 De pronto, la cortina del Templo se rasgó en dos de arriba abajo; la tierra tembló y las rocas se resquebrajaron; 52 las tumbas se abrieron y resucitaron muchos creyentes ya difuntos.

Read full chapter