Add parallel Print Page Options

26 »Así como un ladrón se avergüenza
    cuando lo atrapan,
así se avergonzarán la nación de Israel,
    sus reyes y sus líderes,
    junto con sus sacerdotes y profetas.
27 Es que a un árbol le dicen:
    “Tú eres mi padre”;
y a una piedra le dicen:
    “Tú eres mi madre”.
Me dieron la espalda,
    no me dan la cara;
pero cuando estaban sufriendo me dijeron:
    “Levántate y sálvanos”.
28 Judá, ¿dónde están los dioses que tú hiciste?
    Tienes tantos dioses como ciudades;
pues que ellos vengan y te salven
    cuando estés en desgracia.

Read full chapter