Add parallel Print Page Options

Entonces Saulo, que también es Pablo, lleno del Espíritu Santo, fijando en él los ojos, 10 le dijo:

—¡Lleno de todo engaño y de toda maldad, hijo del diablo, enemigo de toda justicia! ¿No cesarás de trastornar los caminos rectos del Señor? 11 Ahora, pues, la mano del Señor está contra ti, y quedarás ciego y no verás el sol por algún tiempo.

Inmediatamente cayeron sobre él oscuridad y tinieblas; y andando alrededor, buscaba quien lo condujera de la mano.

Read full chapter