Eclesiastés 4
La Biblia de las Américas
Injusticias de la vida
4 Entonces yo me volví y observé todas las opresiones(A) que se cometen bajo el sol:
Y he aquí, vi las lágrimas de los oprimidos,
sin que tuvieran consolador;
en mano de sus opresores estaba el poder,
sin que tuvieran consolador(B).
2 Y felicité a los muertos, los que ya murieron,
más que a los vivos, los que aún viven(C).
3 Pero mejor que ambos está el que nunca ha existido(D),
que nunca ha visto las malas obras que se cometen bajo el sol.
4 Y he visto que todo trabajo y toda obra hábil(E) que se hace, es el resultado de la rivalidad entre el hombre y su prójimo. También esto es vanidad y correr tras el viento[a](F).
5 El necio se cruza de manos(G),
y devora su propia carne(H).
6 Más vale una mano[b] llena de descanso
que dos puños llenos de trabajo(I) y correr tras el viento.
7 Entonces yo me volví y observé la vanidad bajo el sol:
8 Había un hombre solo, sin sucesor[c],
que no tenía hijo ni hermano,
sin embargo, no había fin a todo su trabajo.
En verdad, sus ojos no se saciaban de las riquezas(J),
y nunca se preguntó: ¿Para quién trabajo yo(K)
y privo a mi vida del placer?
También esto es vanidad y tarea penosa(L).
9 Más valen dos que uno solo,
pues tienen mejor remuneración por su trabajo.
10 Porque si uno de ellos cae[d], el otro[e] levantará a su compañero;
pero ¡ay del que cae cuando no hay otro[f] que lo levante!
11 Además, si dos se acuestan juntos se mantienen calientes[g],
pero uno solo ¿cómo se calentará(M)?
12 Y si alguien[h] puede prevalecer contra el que está solo,
dos lo resistirán.
Un cordel de tres hilos no se rompe fácilmente.
13 Mejor es un joven pobre y sabio(N),
que un rey viejo y necio,
que ya no sabe recibir consejos[i].
14 Porque ha salido de la cárcel para reinar(O),
aunque nació pobre en su reino.
15 He visto a todos los vivientes bajo el sol apresurarse a ir junto al joven sucesor[j] que lo reemplaza[k]. 16 No tenía fin la multitud[l] de todos los que lo[m] seguían, y ni aun los que vendrán después estarán contentos con él; pues también esto es vanidad y correr tras el viento(P).
Footnotes
- Eclesiastés 4:4 O, aflicción de espíritu, y así en en los vers. 6 y 16
- Eclesiastés 4:6 Lit., palma
- Eclesiastés 4:8 Lit., sin un segundo
- Eclesiastés 4:10 Lit., si ellos caen
- Eclesiastés 4:10 Lit., uno
- Eclesiastés 4:10 Lit., un segundo
- Eclesiastés 4:11 Lit., tienen calor
- Eclesiastés 4:12 Lit., él
- Eclesiastés 4:13 O, instrucción
- Eclesiastés 4:15 Lit., el segundo joven
- Eclesiastés 4:15 Lit., se coloca en su lugar
- Eclesiastés 4:16 Lit., todo el pueblo
- Eclesiastés 4:16 Así en algunas versiones antiguas; en heb., los
Eclesiastés 4
Reina-Valera 1960
4 Me volví y vi todas las violencias que se hacen debajo del sol; y he aquí las lágrimas de los oprimidos, sin tener quien los consuele; y la fuerza estaba en la mano de sus opresores, y para ellos no había consolador. 2 Y alabé yo a los finados, los que ya murieron, más que a los vivientes, los que viven todavía. 3 Y tuve por más feliz que unos y otros al que no ha sido aún, que no ha visto las malas obras que debajo del sol se hacen.
4 He visto asimismo que todo trabajo y toda excelencia de obras despierta la envidia del hombre contra su prójimo. También esto es vanidad y aflicción de espíritu.
5 El necio cruza sus manos y come su misma carne.
6 Más vale un puño lleno con descanso, que ambos puños llenos con trabajo y aflicción de espíritu.
7 Yo me volví otra vez, y vi vanidad debajo del sol. 8 Está un hombre solo y sin sucesor, que no tiene hijo ni hermano; pero nunca cesa de trabajar, ni sus ojos se sacian de sus riquezas, ni se pregunta: ¿Para quién trabajo yo, y defraudo mi alma del bien? También esto es vanidad, y duro trabajo.
9 Mejores son dos que uno; porque tienen mejor paga de su trabajo. 10 Porque si cayeren, el uno levantará a su compañero; pero ¡ay del solo! que cuando cayere, no habrá segundo que lo levante. 11 También si dos durmieren juntos, se calentarán mutuamente; mas ¿cómo se calentará uno solo? 12 Y si alguno prevaleciere contra uno, dos le resistirán; y cordón de tres dobleces no se rompe pronto.
13 Mejor es el muchacho pobre y sabio, que el rey viejo y necio que no admite consejos; 14 porque de la cárcel salió para reinar, aunque en su reino nació pobre. 15 Vi a todos los que viven debajo del sol caminando con el muchacho sucesor, que estará en lugar de aquel. 16 No tenía fin la muchedumbre del pueblo que le seguía; sin embargo, los que vengan después tampoco estarán contentos de él. Y esto es también vanidad y aflicción de espíritu.
Reina-Valera 1960 ® © Sociedades Bíblicas en América Latina, 1960. Renovado © Sociedades Bíblicas Unidas, 1988. Utilizado con permiso. Si desea más información visite americanbible.org, unitedbiblesocieties.org, vivelabiblia.com, unitedbiblesocieties.org/es/casa/, www.rvr60.bible