Add parallel Print Page Options

Los centinelas me encontraron mientras rondaban la ciudad, me golpearon y me hirieron. Los vigilantes de la torre me arrancaron el velo. Les ruego, mujeres de Jerusalén, que si encuentran a mi amado, le digan que me muero de amor.

El coro

Dinos, bella entre las mujeres, ¿en qué aventaja tu amado a otros hombres, para que así nos ruegues?

Read full chapter