Add parallel Print Page Options

Cuando Mefiboset, hijo de Jonatán y nieto de Saúl, llegó ante el rey David, se inclinó con mucha reverencia. Entonces el rey le preguntó:

«¿Así que tú eres Mefiboset?

Y éste contestó:

«Aquí me tienes, para servirte.»

Y David le dijo:

«No tengas miedo, que por el gran aprecio que le tenía a tu padre voy a tratarte con mucha bondad; voy también a devolverte las tierras que fueron de tu abuelo Saúl, y desde hoy te vas a sentar a mi mesa.»

Mefiboset volvió a inclinarse ante el rey, y le dijo:

«¿Pero quién soy yo? ¡Este siervo tuyo no es más que un perro muerto!»

Read full chapter