Add parallel Print Page Options

Luego, al llegar a Hebrón, le entregaron la cabeza al rey David y le dijeron:

«Aquí tienes la cabeza de tu enemigo Isboset, el hijo de Saúl, que te quería matar. En este día el Señor ha permitido a Su Majestad vengarse de Saúl y de su descendencia.»

Pero David les respondió:

«Juro por el Señor, que me ha librado de toda angustia, 10 que cuando otro hombre, pensando que me traía buenas noticias, me comunicó que Saúl había muerto, yo lo agarré y, en pago de esa noticia,(A) le di muerte en Siclag.

Read full chapter